La economía de India ha registrado elevados índices de crecimiento, por encima del 7% anual desde 2003, alcanzando un máximo del 9,7% en 2006. Los resultados solo se redujeron ligeramente en 2008, situándose en el 5,1%, debido al estallido de la burbuja de valores nacionales y otros títulos como resultado de la crisis económica mundial. En contraste con otros mercados emergentes asiáticos, el principal motor de la economía de India es el consumo interno, representando las exportaciones tan solo el 15% del PIB. El sector exterior ha estado dominado tradicionalmente por los servicios, en particular las tecnologías de la información y la comunicación [TIC] y la externalización de servicios a empresas. El crecimiento del PIB real se sitúo el año pasado en el 9,1%, con un aumento del 8,4% en el último trimestre, impulsado por la pujanza de los sectores de servicios y manufacturas y por el consumo privado. Sin embargo, esta fuerte demanda en el ámbito nacional sigue contrastando con el insuficiente progreso económico del sector agrícola, que todavía representa una sexta parte del PIB y emplea al 45% de la población activa, aunque adolece de importantes ineficiencias y depende mucho de la temporada anual del monzón. La inflación de precios de consumo se sitúo en el 12% en 2010, al registrarse una importante subida de los precios de los alimentos y un aumento también importante de los precios de bienes de capital, valores y propiedad inmobiliaria. A la inflación general de precios han contribuido los precios de los combustibles, así como el hecho de que la capacidad de suministro de la economía de India no ha seguido el ritmo de la demanda. Los altos precios de consumo suscitan cada vez más preocupación y reducen el poder adquisitivo de muchos hogares pobres. Para contener la inflación, el Reserve Bank of India [RBI] ha endurecido su política monetaria aumentando reiteradamente los tipos de interés de referencia a corto plazo desde marzo de 2010. Junto al elevado déficit presupuestario, las principales deficiencias estructurales son las siguientes: el subdesarrollo del sector agrícola; las deficientes infraestructuras; una legislación laboral poco flexible; un exceso de burocracia; rigidez de las leyes del suelo [Ley de Adquisición del Suelo], y escasez de mano de obra cualificada debido a las deficiencias educativas de la mayor parte de la población. Comportamiento sectorial: muchos sectores de crecimiento El tamaño del mercado de consumo potencial, por sí solo, ofrece enormes oportunidades, tal y como ha quedado demostrado por el increíble crecimiento del sector de las telecomunicaciones móviles. En un plazo de tiempo relativamente corto, los niveles de abonados han alcanzado los 584 millones [la mayoría con tarifas de prepago], lo que equivale a un índice de penetración del 49%. Una vez dicho esto, el subsector de las telecomunicaciones puede hacer frente a algunas dificultades en el próximo año debido a la fuerte competencia y a una reducción de los ingresos medios por usuario [ARPU, por sus siglas en inglés], Por lo que parece inevitable una mayor consolidación. El enorme mercado interno y los costes de fabricación relativamente bajos han suscitado el interés de algunas empresas por invertir en India, estimulando el crecimiento de determinados sectores además del sector de las telecomunicaciones en rápida expansión. El crecimiento de las ventas de vehículos nuevos sigue siendo sólido, lo que refleja el mayor poder adquisitivo de la clase media de India, aunque, recientemente, el aumento de los costes de las materias primas y la escalada de los precios de los combustibles han impulsado el crecimiento de las ventas de vehículos de dos ruedas. El rebote del sector del automóvil ha tenido un impacto positivo en otros sectores, como el acero. El crecimiento de la producción de acero crudo de India se frenó situándose en el 2,7% en 2009, pero volvió a aumentar un 6,4% en 2010. Los fabricantes de acero de India han retomado los proyectos de expansión que se habían dejado a un lado durante la crisis económica mundial. El sector farmacéutico de India dispone de un mercado importante tanto para las exportaciones como para el consumo interno. Sin embargo, aunque el mercado está actualmente valorado en aproximadamente 16.300 millones de dólares, el gasto individual en productos farmacéuticos per cápita en India es realmente muy bajo teniendo en cuenta su población. Las perspectivas del sector de las TIC son bastante buenas, como resultado de los mayores niveles de renta disponible y de los niveles relativamente bajos de penetración de PC en India. El textil, en particular el segmento de este sector orientado a la exportación a Estados Unidos y a Europa, sufrieron un duro golpe durante la crisis mundial de 2008/2009, pero han mostrado algunos indicios de recuperación desde entonces, si bien muchas empresas siguen teniendo dificultades. En el sector de la alimentación y las bebidas, las tiendas de comestibles populares siguen mostrando poca madurez y tienen dificultades debido a los problemas causados por las deficientes infraestructuras de India. Sin embargo, teniendo en cuenta que tanto el gobierno como el sector privado prevén hacer importantes inversiones en la mejora de las infraestructuras, la construcción y los sectores relacionados con las infraestructuras y las obras de ingeniería y energía pueden esperar crecer en los próximos años. Perspectivas: se prevé un mayor crecimiento Los fundamentos económicos de India se mantienen relativamente sólidos, con una previsión de crecimiento del PIB de un 9% en este año y un 8,7% en 2012. No obstante, la elevada deuda pública [nacional] y el persistente y elevado déficit presupuestario siguen siendo problemas estructurales. En su presupuesto del año fiscal 2011/2012, el gobierno ha subrayado la necesidad de reducir el déficit presupuestario [hasta el 4,6% del PIB], aumentando, al mismo tiempo, las medidas de apoyo a los pobres [por ejemplo, abaratar el coste del grano], para contrarrestar así la subida de los precios de los alimentos. La administración prevé salvar estas carencias gracias a los mayores ingresos fiscales derivados del crecimiento económico del 9% que se prevé. También tiene previsto liberalizar los precios del petróleo en el ámbito nacional y reducir los subsidios a los combustibles. Sin embargo, los elevados precios del petróleo suponen un riesgo para esta medida, ya que el gobierno se vería obligado a invertir más dinero en los subsidios a los combustibles para poder suavizar las consecuencias sociales de trasladar estos precios a los consumidores. Esta situación desembocaría en un aumento del gasto público y del déficit presupuestario. La alta inflación persistente de los precios al consumo, provocada por el aumento de los precios de los alimentos, también obligaría al gobierno a ampliar los subsidios a los alimentos por encima del nivel previsto. Al mismo tiempo, los ingresos fiscales pueden ser más bajos de lo previsto si las previsiones de crecimiento del gobierno resultan ser demasiado optimistas, lo que generaría una reducción de los ingresos. Por lo tanto, sigue habiendo muchos escollos que podrían indicar que el objetivo de reducir el déficit presupuestario al 4,6% del PIB es demasiado ambicioso. Son necesarios más acuerdos de inversión entre el sector público y el sector privado para proyectos de infraestructuras y el gobierno tiene previsto aumentar los incentivos para los inversores privados. Hasta el momento, la participación del sector privado en el desarrollo de las infraestructuras se ha centrado esencialmente en el sector de las telecomunicaciones. Su participación en otras áreas, como el saneamiento, la producción de energía, las carreteras y los ferrocarriles, ha sido mucho menor de lo esperado. Por ello, en las principales ciudades de India existe un problema permanente de escasez de energía y de agua. El gobierno sigue aplazando las principales reformas estructurales para estimular la IED, por ejemplo, permitiendo la inversión extranjera en el sector minorista. Sin embargo, una tasa de crecimiento a largo plazo del 8% al 9% se considera sostenible, siempre y cuando las reformas económicas sigan progresando, aunque sea de forma pausada. Operaciones comerciales con empresas de India Se dispone de información financiera en el caso de las empresas grandes y de las medianas empresas más grandes, pero puede resultar difícil conseguir información financiera en el caso de empresas más pequeñas, especialmente sociedades colectivas y unipersonales. Tradicionalmente, las empresas de India solo registran beneficios marginales para evitar los impuestos. La rentabilidad real de las empresas de India es muchas veces mayor de lo que se refleja en los balances de situación. Para evaluar los riesgos de crédito en India es importante tener en cuenta el patrimonio privado y la posición de los propietarios de la empresa y sus directivos. Crédito y Caución, como parte del Grupo Atradius, se nutre de diversas fuentes para comprobar la situación de las empresas, incluyendo a proveedores de información, internet y socios locales. Crédito y Caución puede también recurrir a los clientes de una empresa en caso de tener alguna duda, ya que su experiencia comercial puede sernos útil. Las insolvencias no son usuales. Disolver una empresa mediante una demanda puede llevar mucho tiempo, por lo tanto, se debe considerarse como un último recurso para el cobro de una deuda. Condiciones comerciales generales Lo habitual es el comercio mediante cuentas abiertas. Los plazos de 60/90 días son los más frecuentes en las transacciones de exportación a India. Las Cartas de Crédito no son comunes, excepto en el caso de los contratos de importes elevados con el Estado o con entidades públicas. En caso de ser utilizadas, ha de prestarse especial atención a la hora de presentar los documentos correctamente ya que, de lo contrario, el comprador puede aprovecharse de cualquier discrepancia y retrasarse en el pago. El derecho de reserva tampoco es habitual en India e, incluso cuando se estipula de forma específica en la factura, es muy difícil exigir su aplicación legalmente. Los cheques con fecha futura son frecuentes en las transacciones de comercio interior. La legislación india se toma muy en serio el fraude con cheques y puede desembocar en acciones penales. Esta herramienta es más eficaz si el cheque está firmado por uno de los propietarios de la empresa. |
Manténgase informado.Únase a nuestra Newsletter