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España está viviendo una mejora de su competitividad exterior sin precedentes. Con un mercado doméstico prácticamente estancado, en el que desde el segundo semestre de 2011 no han dejado de repuntar los niveles de morosidad, la empresa tiene la necesidad vital de abrirse y competir en los mercados exteriores. De cara a 2013, algunos organismos prevén que España será el tercer país de la OCDE con el mayor aumento de las exportaciones, tratando de compensar una caída del comercio doméstico que, según las últimas estimaciones, está ya en niveles equivalentes a 1992, tras 30 meses de caída libre. Los grandes números dicen que las exportaciones españolas han marcado, en 2012, un máximo histórico, con crecimientos desconocidos en Asia [12%], América del Norte [13%]. Latinoamérica [15%], África [31%] y Oceanía [38%]. Detrás de esos grandes números está el esfuerzo titánico de miles de empresas que hablan de España en todas las lenguas imaginables. Centenares de historias concretas para afrontar una recesión en la que entramos oficialmente en el primer trimestre de 2012 y que durará, al menos, hasta el último de este año. Centenares de historias de éxito pero, también, de fracaso. Fracaso. Alguien tiene que decirlo: la exportación es el camino para miles de empresas, pero podría ser el precipicio para otras muchas más.
Como parte de nuestra labor, cada día contestamos 20.000 veces a la siguiente pregunta: ¿debo venderle a ese cliente9 Sabemos contestar con rapidez y precisión, porque llevamos una década construyendo la dimensión internacional que nos permite procesar la información de miles de asegurados en todo el mundo. Nuestras respuestas a esas preguntan mantienen abiertas, en estos momentos, líneas de crédito abiertas en todo el mundo que superan los 445.000 millones de euros, una cifra prácticamente equivalente a la mitad del PIB español. No existe un producto como el Seguro de Crédito, capaz de darte una opinión sobre un comprador final a miles de kilómetros y resulta que uno de los tres grandes operadores mundiales, con capacidad para tener una opinión actualizada sobre 100 millones de empresas, es español. Somos nosotros.
Un error
Estamos muy bien preparados para responder correctamente a esas 20.000 preguntas. Es básico para acompañar a nuestros asegurados al exterior, pero empezar por esta pregunta a la hora de exportar es un error. Quizás porque en nuestra cartera de asegurados hay una importante presencia de pymes, sin experiencia en internacionalización, llevamos años ayudándoles a plantearse las tres preguntas previas: ¿tiene sentido, por mi tamaño, por mi actividad, que me internacionalice En caso de responder sí, ¿qué mercados debo atacar Una vez establecida esa lista de mercados, ¿cómo voy a distribuir mis productos en cada uno de ellos?
Para ello contamos con una red de mediación que constituye una pieza fundamental en la capacidad de servicio de nuestra empresa. Esta red especializada, que tanto esfuerzo ha costado construir, es uno de los grandes valores que diferencian a la compañía. Aporta un valor diferencial a la hora de ayudar a nuestros asegurados a salir al exterior, con su experiencia acumulada y el apoyo permanente de nuestro servicio de asesoramiento en internacionalización, sin costes añadidos para los asegurados.
Es el momento de intentarlo. El comercio mundial entre empresas crecerá un 2% en 2013. Un 2% más de actividad, de oportunidades, de clientes, de crecimiento de la primera línea de la cuenta en un entorno de negocio tremendamente complicado para las empresas. Nuestro papel es ayudar a construir esa competitividad exterior. En 2008, sólo el 10% de nuestras líneas de crédito comercial a la empresa española se referían a otros mercados: cuatro años después ese porcentaje prácticamente se ha duplicado.
