¿Cómo recuerda sus primeras retransmisiones en directo para CNBC-Televisa desde el parqué de Wall Street, el NYSE y el mercado electrónico del Nasdaq?
Las recuerdo con mucha emoción. Yo no había hecho nunca televisión y para mí fue un momento muy importante. Las primeras retransmisiones fueron desde el NYSE, desde el parqué, y en aquellos años era muy impresionante por el volumen físico de operaciones que efectivamente se llevaban a cabo diariamente. Fui la primera periodista hispana en retransmitir en directo desde allí, y afortunadamente mis colegas de la CNN y de la CNBC me ayudaron mucho.
El Nasdaq no es un mercado, es literalmente un estudio de pantallas gigantes en las que tú decides cuáles son las empresas de las que quieres hablar. El Nasdaq no tiene un “parqué” físico, por lo que es mucho más frío. No hay nada que se pueda comparar al Floor del NYSE; ni siquiera el mercado de Futuros de Chicago.
¿Cómo se ve, ahora, la economía mundial en 2016 desde Estados Unidos?
Pues muy complicada. Mientras que en Estados Unidos gracias a la política energética iniciada por George W. Bush y seguida por Barak Obama ha permitido crear millones de puestos de trabajo y unos precios energéticos históricamente bajos, el resto del mundo se debate entre la estanflación, la caída del consumo, la guerra de divisas y las dudas sobre los Briks. Claramente Estados Unidos mantiene el liderazgo mundial gracias al petróleo barato, su economía flexible y la tecnología que está cambiando el mundo muy rápidamente, mientras que el resto del mundo está aún muy restringido en materia competencial.
Yo creo que China nos dará algún susto: no me parece razonable intentar una economía de libre mercado en un marco político comunista. Japón, pese a las Olimpiadas, está instalada en la estabulación perenne, los países de Oriente Medio conviven con la inestabilidad de la guerra y los bajos precios del crudo, y Europa no tiene un liderazgo claro sobre lo que quiere ser de mayor en materia económico-financiera.
¿Y la evolución de los países emergentes?
Lo que más sigo de los emergentes es Latam, con un enorme potencial pero a falta de un marco legislativo que permita dar seguridad jurídica a la inversión internacional. Los países más preocupantes desde este punto de vista son Brasil, inmerso en un escándalo de corrupción-país sin parangón y, México, que fue capaz de aguantar la crisis del Tequila y de estabilizar su economía, tiene en el narcotráfico un problema extraordinario que mantiene paralizado el norte del país. Venezuela está inmersa en una crisis humanitaria sin precedentes.
Los analistas ahora miran con incredulidad a Argentina. Macri supone la apertura de ventanas, con el Congreso en contra… veremos lo que puede hacer. Uruguay es el país, junto con Chile y Perú, que más estabilidad inversora ofrecen.
¿Qué sabe del seguro de crédito y del papel que está jugando en esta crisis?
En un mundo cada vez más complejo e interrelacionado, los riesgos en diferentes partes del planeta se multiplican, por lo que los seguros de crédito son importantes para que el comercio internacional se desarrolle eficazmente y para que las empresas afronten sus operaciones y exportaciones con garantías.
En este contexto internacional, ¿cómo cree que evolucionará la economía española este año?
La tendencia, tras cuatro años de reformas -sobre todo en el mercado laboral- y con tipos de interés bajos, ha de ser de inercia positiva, al menos los próximos doce meses. Luego, todo dependerá de la percepción que los inversos tengan del gobierno en la Moncloa. Pero las tendencias no cambian de un día para otro, lo normal es que el consumo siga la tendencia alcista de los últimos 12 meses y que siga entrando dinero extranjero.
¿Cuáles son, en su opinión, las principales amenazas de la recuperación económica?
La inestabilidad jurídica -que no política-, aunque están íntimamente relacionadas. Si no hay un marco legislativo estable (promovido por un gobierno sensato), no habrá quien invierta.
¿Cómo afectará a España el acuerdo entre Estados Unidos y once naciones de Asia, América y Oceanía, por el que se establece una zona de libre comercio que afecta al 40% del comercio mundial?
A España y al resto del mundo…. Estados Unidos lleva en su esencia la expansión del libre comercio. Para éste país el crecimiento de la riqueza de sus ciudadanos, vía relaciones económicas, está en su ADN. Todo lo que sea quitar barreras y abrir el terreno de juego son oportunidades para las empresas, los trabajadores y los países. Las restricciones económicas, el proteccionismo... simplemente constriñen la libertad económica.
En sus libros Me equivoqué y En qué jardín nos han metido! aportaba algunas recetas para salir de la crisis. ¿Cuáles siguen siendo más válidas a día de hoy?
Yo creo que para salir de una crisis lo principal es el sentido común. Si se trata de una crisis de deuda -como la que hemos vivido recientemente- lo importante es equilibrar ingresos y reducir los gastos. No hay otra receta mejor que esa. Como dice Fernando Encinar, la deuda es un cáncer. En la vida es mejor no tener deuda nunca y comprar cuando efectivamente puedes pagar.
¡Me Equivoqué!, editado por Planeta, es un manual para jóvenes estudiantes, y un libro para todos aquellos interesados en la empresa y en el emprendimiento. Se trata de historias de ejecutivos de multinacionales, y de presidentes de grandes empresas que cometieron errores a lo largo de su vida empresarial, y que de esos errores aprendieron. Es un libro de inspiración “anglo-sajona”. En España tendemos a destrozar la vida de los empresarios cuando se equivocan, y sin embargo es fundamental equivocarse en la vida, para aprender de los errores. La equivocación, las malas decisiones -siempre que no sea robar- forman parte necesaria del aprendizaje. El hecho de que 13 grandes empresarios contaran errores empresariales fue un hito en la historia empresarial española.
¿Y que quiso transmitir en la otra obra?
¡En qué Jardin nos han metido! es un libro de autoayuda, para aquellos que quieren comenzar en el mundo de la economía y entenderla. Es un libro escrito para que todo el mundo lo entienda, y con tips para llevar una vida financieramente ordenada. Tener control sobre nuestros ahorros, nuestras inversiones, hablar a los niños del dinero, la cultura del esfuerzo y del trabajo, valor vs precio...
