¿Cómo evolucionará la economía española en 2023?
Personalmente lo tengo claro: mal. Los nuevos precios que podemos ver a diario han venido para quedarse. Es lo que tiene llevar veinte años votando a políticos que viven de las promesas que pagan emitiendo deuda. Las familias y también las empresas cada vez tienen menos ahorros. Sus deudas son más caras y sus compras también. Se desplomará la compra de viviendas, caerán los precios, y los propietarios serán un poco más pobres. Luego caerán los sectores adyacentes. El siguiente sector, el automóvil. Mucho tendrían que cambiar las cosas para que todas estas políticas trasnochadas de reducción de emisiones no acaben suponiendo un considerable recorte al PIB del sector. Por suerte, siempre que no haya sorpresas pandémicas, el turismo funcionará bastante bien y ciertas exportaciones también. En definitiva, no creo que vayamos a crecer más del 1%, lo que dejará 2023 en el borde de alcanzar el PIB de 2019. No quiero dejar de comentar el mal uso que, desde mi punto de vista, se está dando al concepto recuperación. Siempre se refleja como alcanzar el PIB de 2019, previo al covid-19, y no está bien empleado. La recuperación se producirá cuando en un ejercicio hayamos alcanzado el PIB que habríamos tenido sin el covid-19 y las nefastas medidas tomadas desde entonces.
No obstante, la renta de las familias mejoró un 1,6% en 2022 gracias a la evolución del empleo, ¿el buen tono se mantendrá durante este año?
España lleva quince años con el PIB per cápita real estancado. Es cierto que en los dos primeros trimestres de 2022 parecía que se podían estar encarrilando las cosas. Después llegó el tercero y el cuarto: a partir del tercer trimestre se desploma el ahorro y eso que se venía ahorrando más que antes del covid-19, después los hachazos fiscales. Esas rentas familiares se vieron incrementadas principalmente por las remuneraciones salariales; ¿pero qué empleo estamos creando? Pues principalmente empleo público, y ya sabemos qué consecuencias tiene eso. No olvidemos que los salarios del sector público son la segunda partida de gasto del Estado, tras las pensiones. Y el que no es público, es precario. Qué tiempos aquellos en que ver a un mileurista daba pena y ahora ser mileurista casi es un logro. De modo que no, el tono no se mantendrá este año. Lo único positivo, es que las familias están menos endeudadas que en la anterior crisis.
¿La inflación y los tipos han tocado techo o seguirán subiendo?
Van a seguir subiendo, más suavemente, pero seguirán subiendo. Tampoco espero mucho más, pero el daño ya está hecho. Los nuevos precios han venido para quedarse, al menos todo 2023 y tal vez algo de 2024. En cuanto a los tipos, algo similar. Aunque todo tiene su parte buena, si la gente aprende que uno no puede endeudarse a treinta años a tipo variable porque es muy arriesgado, habrá servido de algo.
¿Qué otros elementos macroeconómicos marcarán la evolución del país?
El cambio euro/dólar creo que permanecerá en valores similares a los actuales. Hay muchas materias primas que llevan meses de caídas, eso podría dar cierto respiro; y lo más importante que debería pasar, que sería frenar la emisión monetaria, no creo que se vaya a producir. Hay que recortar drásticamente el dinero en circulación. Que se produzca un ajuste brusco y a seguir, porque si no esto se va a ir deteriorando cada vez más y más. Y como el gobierno seguirá viviendo de exprimir a los ciudadanos y emitir deuda, no preveo una evolución muy buena.
¿Cómo han cambiado las relaciones comerciales internacionales con la pandemia y la guerra de Ucrania?
Me ha sorprendido que unos países cuyas aportaciones al comercio mundial son tan ridículas hayan tenido tanto impacto en las economías. Claro que igual le estamos echando la culpa a la invasión de Ucrania y es otra cosa.
¿Habrá un nuevo orden mundial en la producción de los principales recursos estratégicos?
China y el sudeste asiático nos están adelantando por la derecha y sin intermitentes, bueno sí, intermitentes sí llevan porque vienen avisando desde hace muchos años. No hay más que ver las políticas de inversión que llevan en medio África y parte de Hispanoamérica. No parece que aprendiéramos mucho de nuestra dependencia de China durante el covid-19. Y mientras algunos países están preocupados en producir energía barata y fiable, nosotros aquí a desmontar centrales nucleares; y sin energía barata todo el sector industrial se cae, y tras el industrial, todos los demás.
¿Qué papel cree que juega el seguro de crédito en este momento de incertidumbre y perturbación del riesgo de crédito?
Estar asegurado siempre es bueno. La tranquilidad en la vida es muy importante y en los negocios ni te cuento. Saber con quién tratas y cubrirte ante imprevistos ahorra muchos problemas futuros y más si el coste es razonable.
