En el año 1988, Ebrocork inició su actividad de importación, preparación y comercialización de tapones corcho para botellas de vino, con el objetivo de dar servicio a una serie de bodegas próximas a su sede en Navarra. Con el paso de los años, la empresa afrontó una evolución muy positiva, tanto en infraestructuras, como en el ámbito comercial, extendiéndose a países como Argentina, Chile, Sudáfrica, Francia, Italia, Hungría o Suiza, así como a otras zonas vinícolas en España.
Para poder dar cobertura a estos mercados, Ebrocork realizó una importante inversión, apostando por una nueva fábrica en Cirauqui (Navarra), instalando maquinaria de última generación y un laboratorio capaz de dar la máxima garantía y seguridad a todo el proceso productivo de la empresa, de cara a ofrecer a nuestros clientes confianza y seguridad.
Desde Ebrocork aseguran que la clave del éxito es la seriedad y el compromiso que ofrecen a sus clientes. Su disciplina a la hora de cumplir los plazos de entrega y ofrecer un producto de calidad supone un pilar fundamental. Los clientes están tranquilos sabiendo que cuentan con un gran stock de tapones para ofrecer un servicio rápido.
“Crédito y Caución nos aporta tranquilidad, información y seguridad en cuanto a tomar la decisión de entrar a trabajar con un cliente nuevo, sin esa aportación tan interesante, nos encontraríamos con algún que otro disgusto” Afirma José Lorente, General Manager de Ebrocork “También nos aporta información de interés en cuanto a futuros clientes en diferentes zonas, que, utilizando de manera inteligente, siempre ayuda a incrementar nuestra cartera de clientes”
En los últimos años, Ebrocork ha tenido una evolución exponencial, convirtiéndose en pionero de su sector. Destacan algunos aspectos, como que se trata de la primera empresa en el sector en esterilizar los tapones a través de la Irradiación, o que han sido los primeros en conseguir la normativa BRC/Iop, máxima certificación en seguridad alimentaria, en el sector. Además, también cuentan con la clasificación “AA” y otras certificaciones propias del sector.
A largo plazo, desde Ebrocork trabajan para abandonar los mercados de América y África, y centrarse exclusivamente en España y Francia. Esta estrategia responde al objetivo de dar el mejor servicio y calidad a los clientes. Para ello, se ha ampliado la red comercial de la empresa, abarcando prácticamente la totalidad del territorio nacional. Por otro lado, en Francia cuentan con un acuerdo comercial con una empresa que se mueve por todo territorio francés, con sedes propias.